Tres miedos que te paralizan al vender por Pilar Ortiz

Vender no es tu fuerte, lo sé. Pero, por más que no quieras, lo necesitas. Necesitas promover tus servicios, necesitas tener conversaciones con prospectos y necesitas cobrar por ello. Y, aunque hay mucha resistencia de tu parte hacia las ventas, es necesario que reconozcas y trabajes en las razones detrás de esta oposición. 

A través de las sesiones de coaching que he tenido con muchos de mis clientes, he logrado identificar que la resistencia a vender responde a un miedo interno que lo hace todo más difícil. Es altamente probable que ese deseo de evadir las ventas responda a los tres temores que te voy a compartir a continuación.. 

Así que si te quieres reconciliar con las ventas, empecemos. 

1. Miedo a que no te crean: 

¿Has oído hablar del síndrome del impostor? Si no sabes de qué hablo, lee este artículo que escribí al respecto. 

El 70% de la población adulta tiende a minimizar sus logros, por lo que pierden la confianza y seguridad en sí mismos. Cuando esto se presenta, hay una tendencia a dudar y desconfiar de sus capacidades y valor como profesionales y/o empresarios. 

En otras palabras, te sientes inferior a la competencia, dudas de tu autoridad para hablar del tema, porque crees que “eres uno más del montón”. Crees que el interlocutor está examinando cada palabra y que no cree en lo que estás compartiendo. 

Te aterra la idea de no ser competitivo en el mercado o no tener manera de responder las preguntas u objeciones, dejando en evidencia una supuesta “falta de conocimiento”. 

Lo cierto es que tienes la experiencia y el conocimiento necesario, solo que no crees en ti ni en tu valor. 

2. Miedo a que te compren:

“¿Qué, miedo a que me compren?”... Aunque no lo creas muchos profesionales temen vender sus servicios por temor a que el prospecto les diga que sí. Una locura, ¿no?

Lo cierto es que este miedo se presenta cuando te enfocas más en lo que falta, mas no en lo que ya tienes. 

“Es que no tengo el curso terminado”.  “Es que aún no tengo el lugar para atender a mis pacientes”. “Es que aún no tengo el libreto de la conferencia”... Excusas, excusas, excusas.

Cuando crees y esperas que todo sea perfecto, terminarás alimentando este miedo. ¿Cómo vas a querer que te compren si crees que les vas a fallar? Preferirías que mejor te dijeran que no, ¿cierto?

El miedo al éxito es real… Es real porque crees que todo debe ser perfecto para funcionar y ser exitoso. Pero no existe tal cosa, por eso somos humanos. Lo importante no es el cómo, sino el para qué. ¿Para qué ofreces tus servicios? Para ayudar a más personas. 

3. Miedo a que no te compren: 

Este es quizás el más obvio. Temes que después de mucho esfuerzo tu prospecto te diga, “te agradezco, pero prefiero a este otro”.

A nadie le gusta ser rechazado, ¿no? Pero si vives con este miedo, créeme, no vas a querer vender. De no comprarte, no te preocupes, llegarán nuevos y mejores clientes (mientras consigas comunicarte para vender). 

Y recuerda, los miedos son creados por tu mente, por lo que eso que temes quizás nunca pase. Las ventas son necesarias y vas a llegar a quererlas cuando las conviertas en tu aliada y no en tu enemiga. 

Gracias por compartir este artículo con otros. Ayudemos a más genio a salir de la botella del miedo a vender.