Los efectos positivos del síndrome del impostor por Pilar Ortiz

Del síndrome del impostor hemos escuchado muchas cosas, cómo tratarlo, cómo reconocerlo, cómo evitarlo. Sin embargo, hoy quiero hablarte de él desde un punto de vista totalmente nuevo y quizás inexplorado. Hablemos de los beneficios de padecer este síndrome. 

Y por si no sabes qué es, el síndrome del impostor es un fenómeno psicológico presentado en el 70% de la población adulta donde la persona afectada tiende a minimizar sus logros y, en general, pierde la confianza y seguridad en sí mismo. 

¿Qué de bueno puede tener esto? Te explico: 

1. Ser consciente de tener este síndrome te puede impulsar a actuar y hacer algo diferente. 

En la zona de comodidad es difícil tomar acción, pero si algo te reta y sientes que necesitas algo más para llegar a donde quieres, esto te puede mover a hacerlo. Al final, esto puede ser de motivación para mejorar y avanzar, siempre y cuando no lo hagas desde la sensación de estar en déficit, sino que lo sientas como una inspiración y oportunidad de hacer algo diferente. 

2. Reconocer este síndrome te permite tomar decisiones de vida que estén alineadas a lo que quieres en el momento.

Evaluar si, por ejemplo, quieres de verdad hacer ese master que crees te ayudará a ascender de puesto, o si definitivamente buscas otras alternativas, porque no estás en el momento de vida para hacerlo, te da claridad y eso es muy valioso.   

3. El síndrome del impostor te permite reconocer lo que sí tienes, tus talentos, fortalezas y logros. 

¿Cómo? Cuando te sientes inseguro con respecto a lo que eres y haces, es cuando el cerebro hace un recorrido de lo que tienes y no tienes. Allí, si lográs mirar y reconocer lo positivo, vas a recordar los logros alcanzados, una forma de inspirarte y motivarte . 

Este ejercicio también te permitirá activar algo maravilloso, el agradecimiento. Y, créeme, agradecer  trae muchos beneficios, como el tranquilizarte y empoderarte. 

Mi invitación con esto es una sola, no te quedes en un espacio negativo. Cuando le das la vuelta a las situaciones, aún si se ven "adversas", algo bueno siempre saldrá. Hallarás motivación, fuerza para hacer las cosas y claridad de qué es lo que de verdad quieres.