¿Cómo hacer oír tu voz? por Pilar Ortiz
¿Cómo hacer oír tu voz?
Tu opinión vale, lo que tengas que decir es importante, pero muchas veces estás esperando en la Junta Directiva a que otros hablen, tu no te atreves porque crees que si hablas, no te van a escuchar, entonces lo dejás pasar, 10 minutos después, alguien dice justo lo que tú estabas pensando y todas las personas dicen “¡wow! excelente idea” y tú piensas “¿por qué no lo dije?”, ¿te ha pasado esto alguna vez?
No te preocupes, no solo te pasa a ti. Día a día trabajo con líderes alrededor del mundo y comentamos sobre estos hechos que sí suceden: en juntas directivas, en equipos de trabajo, en eventos de networking, etc. Y suceden porque no has aprendido a reconocer y a hacer valer tu voz.
Es por eso que en este artículo te daré unas pautas fundamentales para que tu voz sea escuchada:
- Dale valor a tu discurso, cuántas veces te dices a ti mismo “¿pero quién me va a oír?” “¿a quién le va a interesar esta idea? tal vez no es tan buena”, basta, te estás programando negativamente. Tu opinión vale. Mejor empieza a programar tu mente para que te escuchen, porque si sigues pensando que nadie te escucha, más de eso vas a recibir. Tú eres el primero que le debe dar el valor a tu voz.
- Identifica quiénes están en disposición de escuchar, en la comunicación no solo importa que tu hables, también es importante que tu receptor aplique la escucha activa. Si identificas que está distraído, hay muchas herramientas que dependen de ti para que los demás te escuchen como por ejemplo: quédate en silencio, pausa en tu discurso o chasquea los dedos para enfocar la atención en ti.
- No tomar nada personal porque muchas veces las personas van a oír lo que ellos quieren, no lo que tú estás diciendo, así que sé claro con tu mensaje si es necesario repítelo, pregunta si tu receptor entendió lo que tú estás diciendo. Muy a menudo pasa que decimos algo y la otra persona entiende lo que ella quiere, así que debes estar seguro que tu mensaje está llegando como quieres.
Recuerda si hablas frente a 10, 20 o 500 personas, va a haber 10, 20 o 500 opiniones de ti, tú no puedes estar hablando y al mismo tiempo, pensando en lo que los otros van a decir de ti. Y está bien, somos diferentes y tenemos opiniones diferentes, pero no por eso te vas a frenar para dejar de hacer las cosas o callar tu voz por el miedo al qué dirán.
Con estas herramientas, poco a poco vas a ir dándole valor a tu voz y haciendo que te escuchen.
Recuerda que no necesariamente siempre tenemos la razón, pero siempre hay valor en tus palabras, aun cuando te equivoques, siempre hay un aprendizaje para ti y/o para los demás.
Creo en tu genialidad.